Entrenamiento en HATTRICK

Aquí una de las partes fundamentales del juego. Entrenar te permitirá mejorar a tus jugadores, progresivamente irán mejorando sus habilidades dependiendo de qué línea quieras entrenar.
Para que un jugador entrene, deberá jugar al menos un partido a la semana (recordamos que el primer partido de la semana es el del sábado y no el del miércoles) en la posición que se está entrenando. Si entrenamos, por ejemplo, defensa, el jugador deberá jugar uno de los dos partidos como defensa. En caso de que juegue los dos partidos de la semana, se contará para el entrenamiento la posición en la que juegue el último, es decir, el amistoso, por lo que recomendamos que juegue el amistoso en su posición si es que queremos entrenarlo. Jugar los dos partidos de la semana no supone recibir entrenamiento extra, da igual cuánto juegue.
Cada tipo de entrenamiento tiene una dificultad distinta, es decir, se tarda más o menos semanas en subir un nivel entero. Así, el entrenamiento de defensa es el que más tarda y el de balón parado el que menos, claro que es mucho más valioso un jugador, por ejemplo, con defensa excelente que otro con balón parado excelente.
Hay guías en las que podrás encontrar tablas acerca de las semanas que tarda cada entrenamiento. Aquí no las reproduciré porque no es el fin de esta página.
Los jugadores más jóvenes entrenan más rápido que los mayores, suben antes de nivel. No es conveniente empecinarse en fichar jugadores jóvenes en todas las líneas porque seguramente sólo entrenarás una de ellas y te convendrá tener en las demás a jugadores más experimentados que ya no mejoren, pero que rindan a buen nivel. Los jugadores muy jóvenes cometen fallos por falta de experiencia y los veteranos no lo hacen; todo en Hattrick tiene sus pros y sus contras.
Dentro de los niveles de los jugadores hay subniveles. Es importante este aspecto porque hay mucha gente que lo ignora. Estos subniveles se notan en los partidos, un jugador con más subniveles rendirá mejor que uno con pocos. En otras palabras, supongamos que tenemos dos jugadores con anotación aceptable y estamos entrenando esa característica. Uno de ellos subió de nivel hace cinco semanas y el otro lo acaba de hacer. Como uno de ellos está a mitad de camino entre aceptable y bueno, tendrá un rendimiento mayor en esa habilidad, aunque no podamos verlo en sus características.
Subir niveles tiene una importancia mayor de cara a publicitar a tus jugadores en venta que en lo que se refiere a su rendimiento en el campo. Un jugador que acaba de subir a bueno podrás venderlo por más precio que uno que uno que está a punto de hacerlo aunque su rendimiento en el campo sea prácticamente el mismo.
La velocidad de subida de nivel no depende sólo de la edad de los jugadores, sino también de la intensidad del entrenamiento, de la calidad del entrenador y de los auxiliares.
Por defecto empezarás con un entrenador débil, con el que subir niveles de los jugadores será muy lento. Es conveniente fichar un entrenador aceptable con pobre en habilidades de líder; te costará algo menos de 80.000€ y supondrá una mejora sustancial.
La intensidad del entrenamiento es, por defecto, del 90%, un intensidad bastante baja. Si quieres entrenar bien, será mejor que te aproximes al 100%. Por supuesto esto tiene un inconveniente, que los jugadores tendrán mayor riesgo de lesión. Podrás paliar este riesgo fichando fisioterapeutas que, como todos los especialistas, cobrarán 1.500€ por cabeza y semana. Al 100%, por experiencia personal, podrás valerte con 5 ó 7 fisios. Tendrás lesiones de vez en cuando pero no demasiadas y ahorrarás dinero.
La última variable del entrenamiento son los auxiliares. Cuantos más tengas, más rápido entrenarás aunque, cuidado, nunca debes pasar de 10 en total (sumando auxiliares de portero y normales) porque se pelearán entre ellos y perderás el entrenamiento.
Es conveniente que, una vez configurado tu equipo, entrenes algunas semanas de condición. A corto plazo bajará la forma de tus jugadores, pero te saldrá muy rentable a largo plazo, sobre todo en el mediocampo. Otros entrenamientos como general pueden resultar muy atractivos al principio porque mejorarán la forma de tus jugadores y ganarás más partidos, pero resulta una inversión nefasta a largo plazo porque los jugadores apenas mejoran sus habilidades. La forma va y viene, pero las habilidades quedan.
En definitiva, adapta tu entrenamiento a las necesidades de tu equipo, a la línea donde tengas más jóvenes promesas. Mantente fiel a un entrenamiento y podrás crear buenos jugadores, unos jugarán y otros tendrás que venderlos para mejorar tus otras líneas con jugadores más veteranos y experimentados.